
Carlos Sastre, pese a la dura climatología que en estas fechas son habituales en Ávila, ha aprovechado para salir a la carretera cuantas veces se lo ha permitido el tiempo. “Cuando no puedo salir, hago rodillo, gimnasia y Pilates. También he cogido la mountain bike y he corrido los domingos por el monte con los alumnos de la Fundación Víctor Sastre. Lo suficiente para mantener el tono muscular y quemar la grasilla que sin querer acumulas en estas fiestas”, comenta.
A partir de mañana, comenzarán las salidas en grupo, con sus compañeros, por las carreteras del sur de Portugal. “Vamos a permanecer allí dos semanas y aprovecharemos para intensificar los entrenamientos. Hay que ir poniendo a punto la maquinaria para las primeras citas de la temporada”, añade el vencedor del Tour 2008. Una temporada que para él comenzará el 22 de marzo, en la Volta a Catalunya. “Este año empiezo un poco más tarde que las últimas temporadas, lo que me va a permitir llegar más entonado a las primeras carreras”.
Tras la Volta, en el programa de Sastre sólo se han revelado otras tres pruebas: Amstel Gold Race, Liège-Bastogne-Liège y el Giro, que será su primer gran objetivo de la temporada. “Sí, al Giro quiero llegar en condiciones de disputarlo. El año pasado disfruté mucho en Italia y quiero repetir la experiencia”, afirma. En lo referente al Tour o la Vuelta, no suelta prenda. “De momento voy a centrarme en el Giro. Vamos a ir pasito a pasito y tiempo habrá de pensar a más largo plazo”, concluye.
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